Dispuesto a sentir, no a admitir.

-No, no lo haces.. - Susurra en sus labios. Busca su entrada ahora, deseoso.

Tiene razón, no lo hace. Jadea su nombre solo un par de veces.

Adora que pronuncie su nombre, le da más deseo todavia. Se para en seco antes de entrar en ella. - Rose..- Murmura, pensativo.

- Dime.. - Casi inaudible, aún con sus ojos cerrados.

-No nos hemos cuidado.. - Susurra, mirando sus ojos. Aún, casi, junto a sus labios.

Se muerde leve el labio inferior, apenas. Abre sus ojos, mantiene su mirada fija en él. - No te preocupes demasiado por eso, no ahora - Le pide en un susurro, segura. Ella sabe porqué lo dice y no tiene nada de que preocuparse.

-No puedo no preocuparme.. - Musita, era peligroso, y duda que alguno de los dos tuviera que cargar con las consecuencias.

Se lo pide solo porque ella está segura de que nada malo va a ocurrir, no va a decirle porqué, pero lo sabe. Simplemente lo mira dándole confianza en ello.

Roza sus labios despacio, confiando en ella. Acaricia apenas su cuerpo con sus brazos, ahora llendo más lento.

Apenas logra dibujar en su rostro una diminuta y leve sonrisa. Lo besa suave, despacio.

Lleva una mano a su mejilla, besandola suave. Raro en él. Renueva aquella busqueda, lujurioso.

Vuelve ambas manos a su pecho, dejándolas ahí, despacio.

Muerde sus labios, suave. Entra en ella, moviendose tranquilo.

Gime al sentirlo nuevamente en ella, sin apartarse de el.

Lo mata cuando gime, o pronuncia su nombre. Baja sus labios a su cuello, a sus hombros. Besando allí mientras se mueve en ella, candente.

Ladea su cuello dándole màs espacio, continúa jadeando fuerte, gimiendo de vez en cuando.

Desliza una de sus manos a sus muslos, acariciando allí sin dejar el movimiento dentro de ella. Alarga solo un poco más aquel momento.

Gime su nombre un par de veces, con soltura. Arquea su espalda bajo el cuepo de el, candente.

Besa sus pechos, despacio, tortuoso. Sale de ella a medias para seguir acariciandola.

Apenas mueve un poco sus piernas. Echa suave su cabeza hacia atrás, solo un poco, entregándose total a él. Jadea su nombre.

Sube de nuevo a su cuello, recorriendo con sus labios todo lo que de ella puede. Ella es suya, y ya se lo había dicho. Y nada ni nadie lo cambiaría. Roza sus sexos, tentandola.

Gime una vez ante ese simple contacto, encantada de todo él.

Se pasea por su mandíbula, mordiendo apenas - Di que me deseas.. - Susurra, en su oido. No se sabe con exactitud, si lo pide, o lo ordena.

No va a decirselo, no ahora. Su orgullo permanece intacto, aunque lo deja de lado por momentos, como ese por ejemplo. Niega con su cabeza solo una vez, mordiendose el labio inferior màs o menos fuerte. Lo desea, sí, pero no va a decirselo.

-Dilo.. - Susurra, con una sonrisa arrogante en sus labios. Muerde el lóbulo de su oreja, mientras vuelve a rozar su miembro con el sexo de ella.